Antigua obsesión temporal
Por: Julio A Guerrieri
El ser humano ha tenido desde su inicio una obsesión innata
por tratar de medir el paso del tiempo. Todas las civilizaciones del pasado han
tenido su propio calendario, ya sea lunar ó solar ó ambos para seguir el paso
de las estaciones la mayoría de las veces. Si los periodos de tiempo eran
extensos, los calendarios anuales los llevaban de generación en generación.
Pero cuando se necesitó medir períodos
cortos de tiempo, se hizo necesario recurrir a otros mecanismos no ya basados
en la Naturaleza, sino en el ingenio de sus inventores. Los relojes de agua de
los chinos eran muy eficaces. Y el de los egipcios fue uno de los mejores
mecanismos durante siglos. Se utilizaban también en la antigua Grecia y Roma
para tomar el tiempo a los oradores en una plaza pública y asignar el tiempo a
los juicios en los tribunales. El día fue la forma más sencilla de medir el
tiempo desde la prehistoria. La salida del sol por el este, su ascenso,
descenso y puesta por el oeste todos los días era una regularidad generacional
que siempre se tuvo en cuenta para planificar invasiones, cosechas, viajes y
festejos. Entonces nacieron los relojes de sol para medir las horas de luz.
Hasta después del Renacimiento, ningún mecanismo de relojería fue implementado
en forma eficaz. Pero la Prehistoria nos dice que la tenaz idea de medir el
tiempo llevó al hombre de las cavernas a realizar ciclópeos actos para
controlar el paso del tiempo. Stonehenge, Avebury y muchos otros sitios arqueológicos
nos muestran que menhíres y dolmenes eran construidos por los antiguos
habitantes de esas regiones para medir el paso del Sol y de la Luna entre las
zonas marcadas por sus constructores con fines aún no totalmente esclarecidos.
Más allá de la utilidad de estas dificilísimas
construcciones prehistóricas nos encontramos con una fuerza de voluntad del
hombre antiguo comparable sólo con las rocas que trataba de erigir.
Bienvenidos al 142º programa de EL TERCER PLANETA
Y gracias por estar.
Una nave de la NASA confecciona un mapa de la cola del
sistema solar
10 de julio de 2013: Al igual que los cometas, el sistema
solar tiene una cola. Por primera vez, la nave espacial IBEX (acrónimo de
Interstellar Boundary Explorer, en idioma inglés, o Explorador de la Frontera
Interestelar, en idioma español), de la NASA, confeccionó un mapa de la
estructura de esta cola, que tiene forma de trébol de cuatro hojas.
En un trabajo publicado en la edición del 10 de julio de la revista
Astrophysical Journal, los científicos describen la cola, denominada heliocola,
tomando como base las imágenes recolectadas durante los tres primeros años de
operación del IBEX.
Logran silenciar el cromosoma que provoca el síndrome de
Down
Un grupo de investigadores realiza un estudio in vitro que
soluciona algunos de los problemas que provoca la trisomía del cromosoma 21
Los genes con las instrucciones para el funcionamiento de un
humano están empaquetados en 23 tomos duplicados que se conocen como
cromosomas. Con esa información se construyen los músculos con que nos movemos,
los anticuerpos que nos defienden de las infecciones o las neuronas con las que
interpretamos el mundo. En ocasiones, sin embargo, se producen errores que
introducen un tomo de más en esos pares de cromosomas. Ese exceso de
información se traduce en una producción excesiva de proteínas que acaba por
ser dañina para el organismo.(Seguir Leyendo)
En el articulo encontraras que esta investigación, que es de largo aliento, no podrá hacer nada con quien ya tiene este síndrome pero nosotros simples mortales si podemos cambiar en algo la historia con nuestra colaboración. Como dije en el programa, luego de desarroladá, la nota quien suscribe no profesa religión alguna ni cree en la existencia de ningún dios pero reconoce el trabajo que se realiza en la obra de Don Orione por este motivo me permito invitarte a colaborar, dale entra en su pagina e informáte, te vas a sentir diferente ayudando. S.R
OBSERVAR EL CIELO A TRAVES DE LA RADIO
La rara lluvia de meteoros que llega de más allá del Sistema
Solar
Gracias a las investigaciones hechas por el astrónomo
estadounidense David G. Schleicher sobre el cometa 96p/Machholz 1, podemos ver
una lluvia de meteoros procedente de otro sistema estelar.
Un cometa que probablemente no perteneció a nuestro Sistema
Solar podría estar relacionado con una de las lluvias de meteoros más extensas
en el tiempo de las que tienen lugar al cabo de todo el año. La lluvia es
denominada Delta Acuáridas Sur, con actividad entre el 12 de julio y el 23 de
agosto, coincidiendo incluso con otras lluvias del verano como las
Alpha-Cígnidas el 15 de julio, las Omicron-Dracónidas el 16 de julio, las
Piscis Austrínidas el 28 de julio, las Alpha-Capricórnidas el 28 de julio, las
famosas Perseidas el 12 de agosto o las Kappa-Cígnidas el 18 de agosto. Es
decir, cuando veamos algunas de las lluvias anteriores, entre ellas se
interpondrá algún meteoro de las Acuáridas.(Seguir Leyendo)
Por: Miguel Gilarte Fernández, presidente de la Asociación
Astronómica de España y director
del Observatorio Astronómico de Almadén de la Plata.
SECCION FLOTANTE
Hoy: El Tema
Descubren el calendario más antiguo del mundo
Arqueólogos británicos creen haber descubierto el que puede
considerarse el calendario lunar más antiguo del mundo, hallado en un campo de
Aberdeenshire, en Escocia. Durante sus excavaciones en un terreno del castillo de
Crathes, los arqueólogos encontraron unos hoyos que parecen representar las
fases de la Luna. Un equipo liderado por la Universidad de Birmingham, en
Inglaterra, sugiere que el antiguo monumento fue creado por comunidades cazadoras-recolectoras
hace unos 10.000 años.(Seguir Leyendo)
EL LIBRO
"HISTORIA DEL CALENDARIO" de David Ewing Duncan,
Ediciones Emecé, 285 págs.
Desde las rústicas marcas halladas en los fósiles de la Edad
de Piedra hasta los modernos relojes atómicos, ésta es la historia del denodado
esfuerzo realizado por el hombre en su afán por medir el tiempo. A lo largo de
los siglos, las civilizaciones más diversas libraron una batalla continua por
hacerse con el control del tiempo, y así poder conocer con precisión la
evolución de los ciclos naturales que afectaban su supervivencia.
El recorrido abarca los principales hitos de la Historia:
desde la sociedad más primitiva, que dejó su huella con los enigmáticos
menhires de Stonehenge, hasta los misteriosos sacerdotes egipcios, que
guardaban con celo el secreto del cómputo de las estaciones y de las crecidas
del Nilo. Desde los filósofos y astrónomos griegos, cuya contribución queda
recogida en los anaqueles de la Biblioteca de Alejandría, hasta el poderoso
Julio César, que creó el primer calendario moderno de Occidente. Sin olvidar a
los sabios védicos hindúes, con su peculiar forma de representar los números, y
a los maestros de la Casa de la Sabiduría de Bagdad, que midieron los cielos y
reinventaron las matemáticas. Finalmente, los monjes y clérigos medievales,
quienes a riesgo de enfrentarse con su propia Iglesia abrieron las puertas a la
ciencia, y genios como Copérnico y Galileo, que sentaron las bases de la
astronomía moderna. En suma, conocer la historia del calendario supone
emprender un viaje fascinante por los usos y costumbres de las distintas
culturas que conformaron nuestra civilización actual.
Con una narración tan amena como plena de rigor histórico,
salpicada de curiosas anécdotas, El calendario ocupó los primeros puestos de
las listas de libros más vendidos en Inglaterra y Estados Unidos durante más de
sesenta semanas.(Casa del Libro)
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